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Publicidad mala o buena, ¡es publicidad!

En el mundo del marketing, a menudo se escucha la frase: «Cualquier publicidad es buena publicidad». Aunque este concepto puede ser motivo de debate, es innegable que incluso la publicidad considerada “mala” puede ofrecer oportunidades valiosas de visibilidad y reconocimiento para las marcas. ¿Pero cómo es posible?

Primero, la publicidad, independientemente de su calidad, puede atraer la atención de personas que de otro modo nunca habrían conocido tu marca. Cuando una campaña genera controversia o críticas, es probable que se convierta en tema de conversación. Esta atención puede traducirse en un aumento de la visibilidad, lo que permite que más personas se familiaricen con tu producto o servicio. Y, aunque inicialmente la intención no sea positiva, la curiosidad puede llevar a que los consumidores se acerquen a tu marca para formarse su propia opinión.

Un ejemplo emblemático de esto es la campaña “Pepsi: Live For Now” protagonizada por Kendall Jenner en 2017. Aunque la intención de la campaña era promover un mensaje de unidad y paz, fue recibida con críticas por trivializar temas sociales serios. La controversia generada no solo llevó a que se hablara de la marca en redes sociales, sino que también impulsó un debate sobre la representación y la comercialización de causas sociales. A pesar de la reacción negativa, la visibilidad que obtuvo Pepsi fue inmensa, y muchas personas se acercaron a la marca para discutir el contenido de la campaña. En consecuencia, la empresa experimentó un aumento significativo en el tráfico web y en el interés hacia sus productos.

Sin embargo, es importante destacar que, aunque la publicidad mala puede proporcionar visibilidad, esto no significa que deba ser la estrategia principal. La clave está en equilibrar la creatividad y la calidad con el propósito de construir una imagen positiva y duradera. Si bien la controversia puede atraer la atención, el éxito sostenido depende de ofrecer productos o servicios que realmente satisfagan las necesidades de los clientes.

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