
¿Apoco no quisiéramos que fuera diciembre todo el año? Estar con la familia, desconectarte de la rutina o simplemente vivir la época navideña. Tristemente para algunos, no es así 🥲. Inicia el año y muchos seguimos con la mente en diciembre; no rendimos en nuestro trabajo ni en nuestras actividades diarias, y esto principalmente lo resiente la empresa. En este blog, hablaremos del bajo rendimiento que muestran los colaboradores al volver de vacaciones decembrinas y cómo se puede afrontar esto.
Comprender el motivo
Primero que nada, como director, se debe saber entender el porqué sus colaboradores vuelven mostrando un bajo rendimiento, tomando en cuenta que algunos solamente tienen vacaciones en esta época del año u otros que simplemente los consume esta época del año, hay algunos factores que influyen más de lo que crees en este bajo rendimiento que se muestra una vez que se termina esta temporada. Algunos motivos pueden ser:
1.Fatiga postvacacional:
Así sea una semana, dos semanas o más, el regresar a la rutina diaria después de un descanso, afecta la concentración y puede llevar unos días volver a recuperar ese enfoque que se necesita para hacer el trabajo.
2. Desconexión:
Obviamente el estar de vacaciones te lleva a desconectarte de todo, intentas no pensar en el trabajo y enfocarte en descansar, en tu familia o salir a distraerte y una vez que se reincorpora nuevamente al trabajo puede puede afectar la coordinación y la eficiencia en el equipo.
3. Desmotivación:
Puede que el colaborador no haya cumplido sus expectativas a lo largo del año tanto laborales como personales y esto le genere un sentimiento de frustración y desmotivación en cuanto a iniciar el año.
Recupera la productividad
Para esto, te compartiremos algunos consejos que puedes tomar para volver a activar a tu equipo de trabajo:
1. Reintegración progresiva:
Implementar un proceso de reintegración gradual para que de esta manera, tu equipo de trabajo se vaya adaptando al ritmo que llevaban antes de tomarse ese descanso.
2. Metas claras:
Define metas realistas y alcanzables para el primer trimestre del año, así, tu equipo tendrá una dirección clara y motivadora.
3. Incentivos:
Introducir programas de reconocimiento y recompensas para motivar al equipo y reconocer los logros individuales y colectivos, de tal manera que se vayan incorporando nuevamente al ritmo de trabajo y puedan cumplir los objetivos iniciales fijados por la organización.
Encarar la disminución en el rendimiento de las empresas tras el periodo vacacional de diciembre demanda un enfoque exhaustivo que tome en cuenta las distintas necesidades y expectativas de los empleados.
La implementación de estrategias proactivas se presenta como una vía efectiva para superar los retos que surgen después de las vacaciones, permitiendo no solo revitalizar la motivación de los equipos, sino también establecer las bases necesarias para encaminarse hacia un año venidero caracterizado por el éxito y la productividad sostenida.